Si no se trata la enfermedad de forma natural, con el tiempo el cartílago de la articulación y el tejido que la rodea se dañan. A menudo ocurre que empieza a dañar las partes marginales de los huesos. Este fenómeno ocurre porque la inflamación de la articulación activa la producción de enzimas que comienzan a erosionar las partes marginales de los huesos. Luego el cuerpo reemplaza el tejido dañado por tejido cicatricial. Los síntomas comunes de la artritis reumatoide son: rigidez, hinchazón, fatiga crónica, anemia, pérdida de peso, fiebre, dolor…
Esta enfermedad afecta con mayor frecuencia a mujeres mayores de 40 años, pero cada vez más personas más jóvenes la padecen. Y por eso quieres introducir vitaminas en tu cuerpo que tengan potentes propiedades antiinflamatorias. En este caso, ¡la VITAMINA E ES FUNDAMENTAL! Es un potente antioxidante que protege la articulación de daños. Aumenta la movilidad articular.